“La participación del escribano garantiza la legalidad de sus actos y genera certeza en las relaciones jurídicas, lo que previene posteriores litigios. El notario custodio de la seguridad jurídica, resguarda y protege a usted y a sus bienes. Frente a los hechos y actos que forman parte de su vida privada, familiar, laboral o empresarial,
el consejo del escribano lo ayudará
a formalizar sus acuerdos
y contratos, a proteger sus derechos y concretar sus decisiones.
El escribano cumple también una labor preventiva. En el caso de emprender un negocio, el asesoramiento que brinda este profesional es fundamental para adoptar la opción más conveniente, porque es quien analiza y evalúa la importancia de los datos que se disponen y, en general, nos previene acerca de nuestros derechos y obligaciones.”

La función Notarial en la familia Insua, tiene sus orígenes en el año 1898, cuando don José Insua comienza su carrera en el Notariado de la Provincia de Buenos Aires.- Estudioso de los temas Notariales presenta diversos trabajos, entre los que resalta “Capacidad legal de la mujer divorciada” con el que merece el premio José María Moreno.

Mas de 100 años pasaron desde el comienzo del estudio y perfeccionamiento en el ejercicio notarial, mediante los cuales fueron transmitiéndose de generación en generación los valores, la dedicación, la honestidad y compromiso con esta honorable profesión de Escribano.

Han transcurrido varias generaciones de NOTARIOS, esto nos ha permitido atender cálidamente a numerosas empresas y particulares, siendo valorado por la comunidad profesional y todos nuestros requirentes.